Por mi forma de ser algunas veces me gusta romper las barreras que nosotros mismos nos imponemos.

Esta noche quise hacer algo que me resultara completamente ilógico para mí y romper mis miedos y tabúes. Esta noche quise pasearme en ropa interior por la ciudad y experimentar por mí misma las sensaciones que me provocaría.

No sin mucho recelo, me quité el vestido y me quedé solamente con mi ropa interior y zapatos. Me puse un abrigo largo y busque una calle con la iluminación adecuada y con no demasiado tránsito de vehículos y peatones, aunque alguno pasó y tenía que correr a cerrarme el abrigo y aparentar ser una buena chica 😉

Me invadió una sensación de libertad que no había conocido antes y me sentí orgullosa de lograr saltarme mis propias barreras. Jugué con las hojas de los arboles en el suelo, me sentía viva y ni siquiera sentía el frío que hacía en la calle. Durante unos minutos Nina volaba sobre la calle llena de hojas de Madrid y grabé este vídeo para recordarlo siempre.

Besitos